15 de diciembre (de como sentirte un mierda)

Hola amig@s,


Será difícil olvidar el 15 de diciembre de 2011 igual que quedó grabado en mi memoria el 6 de marzo de 2005.


En aquella fecha de marzo me despidieron (sin pistas previas) de mi primer trabajo, y me quedé con cara de gilipollas sin saber que hacer, sin saber por qué el mundo laboral era tan cabrón.


En el caso de la fecha de hoy, 15 de diciembre de 2011, será difícil de olvidar porque ha sido la primera vez que me he ofrecido voluntario para el despido.


Mis planes siguen en marcha, y este era uno de los múltiples pasos que tenía que dar, pero que la gente que se supone que más te quiere, no apoye tus decisiones y te haga creer que eres un mierda es posiblemente uno de los dolores mas intensos que puedes sufrir.


Nunca había hecho ésto. Esto de presentarse voluntario para el despido. De hecho mi mente me decía que era un error, como cuando conduces un coche de alquiler en Irlanda y tu cerebro te dice que vas por el lado equivocado.


No me jode que mis amistades piensen que soy un gilipollas que va a arruinar su vida. SE que soy un gilipollas, y SE que estoy arruinando mi vida. No me importa que mis conocidos piensen que soy un gilipollas.....SE que soy un glilipollas.


Pero lo que mas dolor causa es que los que te quieren PIENSEN Y DIGAN que soy un gilipollas, y que a mis treinta y pocos años estoy cometiendo el error de mi vida.


Ahora mismo he decidido desconectar mi corazón y regirme solo por mi puta mente racional y carente de sentimientos. Porque tras la charla mi corazón solo me dice que soy un mierda y que debería tirarme por un balcón y dejar toda esta mierda, dejar de dar problemas.


Tan solo mi mente me dice que hecho bien las cosas. Se que va a ser duro, pero a mis treinta y pocos años no puedo agachar la cabeza en un agujero solo por la idea de que cualquier cosa puede ser peor que lo que ya tengo. NO LO SE. NO SE LO QUE VA A PASAR EN EL FUTURO, pero si se lo que está pasando en el presente, y se que aguantar vejaciones morales y psicológicas me están conduciendo al borde del mismo balcón que ahora mismo me planteo visitar. Se trata de elegir la salida del balcón, la salida de la escopeta recortada (y me cagüen to' dios) o la salida de dejarlo todo y comenzar con algo nuevo.


Quizá ésto no les guste a los que mas me quieren, pero quizá su falta de apoyo me indica que realmente no me quieren tanto como dicen.....


En cualquier caso, el 15 de diciembre será recordado como un día triste.... muy triste.